11 de marzo de 2013

Empieza mi cambio


                                                 
          
             Hoy a 2 años de haber creado este Blog me decido por fin a escribir. Dentro de mí han pasado todas las emociones posibles: amor, felicidad, orgullo, penas, añoranza, rabia, rebeldía, resignación, esperanza, desesperanza. Pero sin duda sigue presente la culpa,  a veces escondido tras un sonrisa de mis hijos, un gesto de felicidad, un comentario positivo sobre mi crianza; ese sentimiento que escondemos muchas mamás pero que pocas nos atrevemos a difundir. Sigo viviendo en el ritual del día a día, y creo que si fumara sería sin duda  una viciosa. 

Me decido a escribir porque necesito expresar, como cualquier mujer, mis sentimientos hacia el mundo, necesito que sepan mis hijos que lucho cada día para poder estar más tiempo con ellos, que no me quedaré pegada en la resignación.

Me decido a escribir para expresar mi rabia contra este mundo patriarcado que han construido generaciones pasadas, que nos enseñaron que debíamos trabajar y ser independientes en un mundo creado para hombres.

Me decido escribir porque quiero formar una tribu para que muchas mujeres madres, que estamos solas criando nos acompañemos, conversemos de nuestra penas y alegrías. Como dice un proverbio africano: "se necesita una tribu entera para criar a un niño".

Me decido escribir para que mi hija sepa que cuando sea una mujer podrá realizarse como persona, pero que cuando decida ser madre su trabajo más importante será criar y lejos cualquier sacrificio en pos de su maternidad será infinitamente compensada. 

Me decido a escribir porque creo, instintivamente, fuera de cualquier estudio, organización y libros de crianza, que lo mejor para los hijos es su madre y padre, y no las nanas y las guarderías.

Me decido a escribir porque deseo desde mi corazón estar presente cuando mis hijos tengan un conflicto, cuando tengan una duda, cuando se enfermen, y cuando tenga tareas.

Me decido a escribir porque quiero que mi casa tenga olor a comida casera, a cariño de hogar...y eso SOLO se los podemos entregar YO y su PAPÁ. Así de simple.